domingo, 27 de agosto de 2006




Noche tras noche, veía una sombra pasar por debajo de mi cama, no hacía ruido alguno, solamente pasaba...

No trataba de tocarme o hablarme...simplemente...pasaba...

Un día intenté tocarla, intenté hablarle...y dejó de pasar...

2 comentários:

dulce leteo disse...

Suele pasar.

Carlos Mal disse...

Sabes qué? Me gustó bastante este cuento. Completito y muy redondo. Bien hecho.